miércoles, 3 de agosto de 2011

Las Amigdalas y la Adenoide




LAS AMIGDALAS Y LA ADENOIDE


En el pasado, era muy común que a los niños les extrajeran las amígdalas y la adenoide. Actualmente, los médicos saben mucho más acerca de las amígdalas y la adenoide y son más cuidadosos acerca de sus recomendaciones para extraerlas.

¿Qué son las amígdalas y la adenoide?
Las amígdalas son masas de tejido en forma de ovalo y de color rosado ubicadas a ambos lados de la garganta. Las amígdalas pueden ser de diferentes tamaños, dependiendo de cada niño(a). Pueden ser grandes o pequeñas. No hay un tamaño “normal”. Uno puede ver las amígdalas normalmente al ver la parte de atrás de la boca con una linterna. Oprimir la lengua podría ser de ayuda, pero eso hace que a algunos niños les de nausea. La úvula o la campanilla de tejido que cuelga en la parte de atrás de la boca no es lo mismo que las amígdalas.
A la adenoide se le refiere frecuentemente como “las adenoides”. Eso es incorrecto, porque la adenoide es una sola masa de tejido. La adenoide es parecida a las amígdalas y está ubicada en la parte superior de la garganta, sobre la úvula y detrás de la nariz. A esta área se le conoce como la nasofaringe. La adenoide puede verse solamente con espejos especiales o con instrumentos que se pasen por la nariz.
Tanto las amígdalas como la adenoide son parte del sistema de defensa de su cuerpo contra las infecciones. Ya que hay tejidos parecidos en el cuerpo que tienen la misma función, extraer las amígdalas o la adenoide no daña la capacidad del cuerpo para combatir las infecciones.

¿Qué es la amigdalitis?
La amigdalitis es una inflamación de las amígdalas normalmente debido a infecciones. Hay varios signos para determinar si se tiene amigdalitis, tales como lo siguiente:
• Amígdalas rojas e hinchadas
• Una substancia blanca o amarilla que cubre las amígdalas
• Una voz gutural
• Una garganta adolorida
• Incomodidad o dolor al tragar
• Nódulos linfáticos (glándulas) hinchados en el cuello
• Fiebre

¿Cuáles son los síntomas de una adenoide agrandada?
No es fácil darse cuenta en todas las ocasiones si la adenoide de su niño(a) esta agrandada. Algunos niños nacen con una adenoide más grande. Otros niños podrían tener un agrandamiento temporal de la adenoide debido a resfriados u otras infecciones. Eso es especialmente común entre los niños pequeños. La hinchazón constante puede causar otros problemas de salud, tales como infecciones de oídos y de senos nasales (sinusitis). He aquí algunos signos de agrandamiento de la adenoide:
• Respirar por la boca en lugar de respirar por la nariz la mayoría del tiempo
• La nariz suena como si estuviera tapada cuando el(la) niño(a) habla
• Tener una respiración ruidosa durante el día
• Roncar de noche

Tanto las amígdalas como la adenoide podrían estar agrandadas si su niño(a) tiene los síntomas mencionados arriba, además de lo siguiente:
• Una respiración que se detiene por un corto periodo de tiempo por la noche al roncar o al tener una respiración ruidosa (a eso se le llama “apnea”).
• Sofocamiento o jadeo durante el sueño.
• Dificultad para tragar alimentos, especialmente alimentos sólidos.
• Una voz gutural constante, incluso si no se tiene amígdalas.

Tratamiento
Si su niño(a) tiene cualquiera de estos signos o síntomas de agrandamiento de las amígdalas o de la adenoide y no parece mejorarse por un periodo de varias semanas, LO INDICADO ES REALIZAR UNA CONSULTA EN LA CLINICA. En el caso de muchos niños, las amígdalas y la adenoide se agrandan sin tener una infección obvia. Muchas veces vuelven a encogerse sin darles tratamiento.
De acuerdo a las recomendaciones de la Academia Americana de Pediatría, luego de evaluar a su hijo (a), podría recomendar que se realice la cirugía debido a las siguientes condiciones:
• Hay una hinchazón de las amígdalas o de la adenoide que hace la respiración normal difícil (eso podría incluir el síntoma de la apnea).
• Las amígdalas están tan hinchadas que su niño(a) tiene problemas para tragar.
• La adenoide está lo suficientemente agrandada que hace la respiración incomoda y altera el habla y posiblemente afectara el crecimiento normal de cara. En dicho caso, se podría recomendar cirugía para extraer la adenoide solamente.
• Su niño(a) tiene infecciones de oídos o de los senos nasales a pesar del tratamiento. Dicho caso, se podría recomendar cirugía para extraer la adenoide solamente.
• A su niño(a) le da dolor de garganta severo demasiadas veces cada año.
• Los nódulos linfáticos bajo la quijada inferior están hinchados o adoloridas por al menos seis meses, incluso si se da un tratamiento de antibióticos.

¿Cómo puedo prepara a mi niño(a) para la cirugía?
A pesar de que dicha cirugía no es tan común antes, algunos niños necesitan que les extraigan las amígdalas y/o la adenoide. Si su niño(a) necesita que la hagan cirugía, asegúrese de que sepa que pasara antes, durante y después de la cirugía. No mantenga la cirugía como un secreto para que su niño(a) no sepa. La cirugía podría asustar a su niño(a), pero es mejor ser honesto(a) que dejar que su niño tenga temores y preguntas sin contestar.
El hospital podría tener un programa especial para ayudarle a usted y a su niño(a) a que se familiaricen con el hospital y la información sobre la cirugía. Si el hospital lo permite, trate de quedarse con su niño(a) durante toda la visita al hospital. Deje que su niño sepa que usted estará cerca durante toda la operación. Yo como su pediatría también puedo ayudarle a usted y a su niño(a) a comprender la operación y hacer que sea menos amenazante durante el proceso. Darle un poco de helado después podría ser de ayuda.

Orientación para niños, adolescentes y padres. Academia Americana de Pediatría